Bogotá II


BOGOTÁ II

La cordillera de los Andes, al entrar en Colombia desde Ecuador, se divide en tres y atraviesan el país de Sur a Norte, confiriéndole una orografía excepcional, que sumado a estar en el área Ecuatorial generan una vegetación y una riqueza hídrica espectacular, que te hace entender, entre otras cosas como pudo desarrollarse un movimiento guerrillero tan importante.

La cordillera oriental es donde está asentada la ciudad de Bogotá y aún se crece un poco sobre la misma para acompañar a la ciudad de Sur a Norte, como si la estuviera escoltando. Así cuando te desplazas por la ciudad, si ves que la cordillera se eleva sobre los 2600 metros de Bogotá queda a tu derecha es que te diriges al sur y viceversa.

Está ciudad mastodóntica y caótica es en realidad muchas ciudades, que va mostrando sus profundas desigualdades de Norte a Sur y que sus barrios se definen por estratos sociales. Estos días que llevo por aquí he caminado por barrios muy diferentes, Cedritos, La candelaria, el Centro, la 19, la séptima, Teusaquillo, Chapinero, USME…., donde se aprecian las diferencias sociales existentes a simple vista.

En un viaje en Transmilenio, sistema de transporte masivo –y terriblemente masificado- da para muchas cosas, desde los empujones para entrar  -o salir-, a la lucha por obtener un asiento o quedarte de pie y prensado junto al resto de pasajeros, que te roben el móvil –por aquí celular-, la cartera o lo que puedan, y entretenerte con la sucesión de personas –en un alto porcentaje jóvenes venezolanos- que te piden una colaboración, con la excusa de venderte unas galletas, unos dulces, un bolígrafo, o una canción.

También sirve para ver cómo cambia la fisonomía de los barrios a medida que avanzan estos autobuses articulados con carril exclusivo y altamente contaminantes, que van anunciando en sus letreros luminosos “próxima parada calle…100, 85, 26…, o parada de Alcalá, Marly, centro de memoria, universidades…y donde una vez subes te resignas a trayectos larguísimos para llegar a tu destino.

Otros transportes son las busetas del sistema STIP, más flexibles en sus recorridos, y que si no consigues asiento tienes dificultad para mantener el equilibrio mientras atraviesan serpenteando entre el trafico por las calles a toda velocidad. toda velocidadel 

El Taxi, otra opción, que no siendo un transporte caro siempre tienes el riesgo que te “tumben”, especialmente cuando comprueban que no eres de aquí. Siempre queda la ilegal –pero muy utilizada- opción Uber, que fija el precio de recorrido previamente. En todas ellas siempre estas a merced de los “trancones”, tan habituales en las horas punta.































































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